Esta película amable y tierna que tantas sonrisas sonsaca,
es a la vez despiadada y brutal. Trata de dos sentimientos humanos contrarios:
el ansia de venganza y el deseo de reconciliación. La protagonista, una Kate
Winslet genial, lucha entre estas dos pasiones para liberarse de un trauma de
la infancia que ella considera como una maldición de la que tiene que
redimirse, como si fuera un pecado. Para ello vuelve a su pueblo natal, como
una original modista y diseñadora educada en Paris, a reencontrarse con las
personas que tanto daño le hicieron y a las que no está segura si debe
escarmentar o perdonar.
Existe una frase en español que dice que no hay que
molestarse en regalar margaritas a los cerdos. Tampoco habría que molestarse en vengarse de ellos. La mayoría de las veces la única solución es quemar el
pasado. Lo más simple: encender una hoguera, echarlo todo allí y seguir
adelante, sin venganzas ni reconciliaciones. Dejar que el tiempo haga el
trabajo y que se salve sólo aquel que sepa encontrar y aceptar su camino.
“Tú puedes crear”, te dice alguien cuando todo parece
perdido. Por todos los santos, cuánto me enseña el cine.
Julia Lasagabaster
Fotos tomadas de internet. Textos: Julia Lasagabaster
Vuelvo dispuesta a luchar
¿Podré reconciliarme con el pasado?
Sólo el traje no es la salvación
Ni siquiera el amor
Pero puedes crear
¡Fuego y adelante!
No hay comentarios:
Publicar un comentario